El incendio del cerro del Toro está controlado pero no extinguido, y este jueves las tareas de control y combate han sido muy intensas porque las llamas avanzaron por las laderas Este y Sur, llegando a los bordes de un establecimiento vitivinícola en el primer caso, y a una zona de campings en el otro.

El fuego, por lo cambiante de los vientos en la zona, primero llegó hasta los bordes de un viñedo (en dirección a camino Los Arrayanes), lo que demandó un despliegue gigantesco de equipos y personal que logró sofocarlo en el extremo de un monte de eucaliptos que fue arrasado.

Pero luego otra cabeza del incendio comenzó a avanzar hacia el Sur lo que llevó a las autoridades a ordenar la evacuación de los campings y centros turísticos que se encuentran en las cercanías, casi en la planta urbana de Piriápolis. Unas 500 personas fueron alojadas en el Argentino Hotel.

El último reporte da cuenta de unas 300 hectáreas de montes naturales y artificiales, y zonas de campo y arbustos quemados desde la madrugada del miércoles 25, lo que significa que gran parte del cerro del Toro ha sido presa del fuego, cuyo inicio pudo haber sido intencional.

En Piriápolis se encuentran desplegados unos 100 efectivos de Bomberos y brigadas forestales, así como personal de la Fuerza Aérea y la Armada Nacional con 4 helicópteros a disposición, así como 15 máquinas de distinto tipo, 10 camiones cisterna y unos 45 funcionarios de la IDM.

En forma paralela, durante la tarde de este jueves se combatió otro foco secundario en el cerro de la Virgen que al caer la noche estaba controlado, así como otro incendio al Norte de pueblo Edén en proximidades del cerro Dos Hermanos donde la situación también se pudo controlar.

En el balneario Las Vegas

Un incendio que inició en la noche del miércoles en la zona de los balnearios costeros Las Vegas y La Floresta, arrasó con un aserradero y provocó daños en una vivienda de la zona, a lo que los bomberos aún trabajan para contener el fuego.

Si bien el personal de la Dirección Nacional de Bomberos había contenido las llamas en la mañana de este jueves en la zona de Las Vegas, este se reactivó más al este, en los alrededores de La Floresta, donde se quemó un «quincho» -cobertizo de paja- de una casa.

El incendio, que cuenta con focos ígneos a ambos lados de la ruta Interbalnearia, principal arteria del tránsito en la costa del sureste de Uruguay afectó un aserradero cercano y se extendió rápidamente a raíz de las rachas de viento de hasta 60 kilómetros por hora que se registraron.

«La situación es bastante imprevisible por el viento y la sequía y eso hace que la propagación sea más violenta», advirtió el subdirector de Bomberos, Richard Barboza.

En total, de acuerdo con información de la prensa local, los focos ígneos registrados desde el miércoles en la zona quemaron unas 50 hectáreas.

A lo que los vecinos colaboran con las autoridades llevando bidones con agua, la Ruta Interbalnearia debió ser cortada por el intenso humo registrado y se habilitaron desvíos que, según informó recientemente el Ministerio del Interior, ya fueron levantados al habilitarse una senda de circulación.

«Solicitamos extremar cuidados al circular por la zona debido a presencia de personas y de efectivos que trabajan en el incendio. Recomendamos evitar la zona», indicó la cartera mediante la red social Twitter.

Este incendio se suma al que inició en la madrugada del miércoles en el departamento de Maldonado (sureste), que afectó la localidad de Cerro del Toro al dejar unos 200 evacuados y consumir alrededor de 40 hectáreas, así como a otro ocurrido el 19 de enero en el departamento (provincia) de Treinta y Tres (este), que afectó entre 250 y 300 hectáreas de campo.

Uruguay atraviesa una severa sequía en medio de la temporada del verano austral.

En ese contexto, La Embajada de Estados Unidos informó el martes que donará a Uruguay «más de un millón» de dólares en equipamiento para reforzar la capacidad de combatir incendios.

La donación, enmarcada en la celebración del 70 aniversario del primer acuerdo de cooperación en defensa entre Estados Unidos y Uruguay -ratificado en 1953-, supone un «importante apoyo» para el combate a los incendios.

Según informó la sede diplomática, Estados Unidos donará, a través del Programa de Asistencia Humanitaria (HAP, en inglés) del Comando Sur, alrededor de un millón de dólares en equipamiento humanitario y de seguridad.

El equipamiento incluirá 120 trajes de protección contra incendios y 40 equipos de respiración autónoma para los bomberos, así como cuatro generadores de oxígeno de última generación para hospitales locales.