El Índice de Precios de Frontera (IPF) es elaborado en el Campus Salto de la Universidad Católica y desde 2015 toma en cuenta productos de consumo general. La medición de noviembre refleja una diferencia de casi 123%, levemente superior a la medición de setiembre. En alimentos, la brecha es de 144%, en productos del hogar el 79% y en transporte, 51%.

La economista Gimena Abreu, una de las autoras del informe, destacó en Informativo Uruguay que “es extremadamente difícil pensar en medidas que pongan los precios en una situación de competencia, aunque no hay que descartar las propuestas presentadas, que apuntan a minimizar el impacto”.

A su vez, advirtió que el informe no toma en cuenta los servicios, donde la diferencia también es amplia. “Peluquerías, salones de belleza, taller mecánico y hasta el dentista, suelen ser consumo que se traslada al otro lado de la frontera” en la actual coyuntura.