Una mujer de 62 años en situación de calle fue trasladada a un centro de salud el domingo, en el primer día de aplicación de la nueva ley de internación compulsiva que habilita el traslado de personas, aún contra su voluntad, si viven o duermen en la calle y tienen problemas de salud mental que representan un riesgo para ellos o para terceros.

El Ministerio de Desarrollo Social (Mides) presentará este lunes un informe sobre el primer día de aplicación de la nueva ley, que amplía los casos en los que se establecía la internación compulsiva de personas en situación de calle.

Antes era únicamente ante riesgo inminente de muerte por algún problema de salud física. Ahora se agrega la patología psiquiátrica como causa de posible traslado a un centro de salud, aún contra su voluntad, si un médico constata que esa patología la expone a un peligro para sí o para terceros (vecinos) al estar en la calle.

El procedimiento establecido indica que el traslado puede ser solicitado por los equipos de calle del Mides o por vecinos que denuncian una situación irregular o violenta con la persona en situación de calle.

Para ser trasladado e internado se debe convocar a médicos de ASSE (públicos) que constaten la situación de riesgo para la persona y para terceros.

Si la persona se resiste al traslado a un centro de salud, entonces se convoca a la Policía para realizarlo.

En todos los casos la persona debe ser atendida y compensada en un centro de salud y luego, si es necesario, derivada a una clínica psiquiátrica.