Al menos 16 personas —o hasta 22, según algunos conteos— fueron asesinadas en la noche de este miércoles en un doble tiroteo en un restaurant y un local de bowling en la ciudad de Lewiston, en el estado de Maine, Estados Unidos.

La Policía continúa en la búsqueda del homicida, que se dio a la fuga, y piden a los residentes de la localidad que se refugien en sus casas, ya que se trata de una “situación activa”.

El principal sospechoso es Robert Card, un hombre de 40 años que, según informan las autoridades, debe considerarse “armado y peligroso”.

Con la cifra de muertos que dejó el doble tiroteo, ya es considerado el peor del año y uno de los mayores de los últimos años en Estados Unidos.

Según las cadenas ABC y CNN la cifra se eleva ya a 16 fallecidos y al menos otras 60 personas han resultado heridas. La cadena Fox News, por su parte, cuenta hasta 22 fallecidos.

Mike Sauschuck, comisario del Departamento de Seguridad Pública de Maine, dijo que por el momento solo buscan a Card. Confirmó que se ha encontrado el coche blanco de Card en la localidad de Lisbon, a unos 12 kilómetros del lugar del tiroteo, y por eso pidió también a los vecinos de esa ciudad que se mantengan en sus casas, al igual que los de Lewiston.

Asimismo pidió a cualquier persona que tenga información sobre su paradero que se ponga en contacto con las autoridades llamando al 911 y agradeció la colaboración ciudadana recibida hasta el momento, que según señaló está siendo muy activa.

Sin embargo, Sauschuck no quiso entrar en detalles sobre el sospechoso, que los medios han identificado como un instructor de manejo de armas con un historial de problemas mentales, y que es militar en la reserva. 

ABC News, que cita a fuentes policiales, dijo que el hombre pasó dos semanas este verano en un centro de salud mental tras amenazar con llevar a cabo un tiroteo en una base de la Guardia Nacional.

Y ante las peticiones de los medios insistió en no dar ninguna cifra de víctimas, ni exacta ni aproximada, porque la situación es “fluida” y por no actualizar dichos datos pocas horas después.