Valentín Soca le dio a Uruguay su única medalla de oro en el Sudamericano de Brasil, disputado este fin de semana en San Pablo. El corredor de 21 años, nacido en la localidad riverense de Vichadero, se impuso en la prueba de 5.000 metros.

En abril batió el récord continental sub-23 y se apuntaba como candidato. El domingo, en el cierre del evento, tomó la punta a 100 metros de la meta pasando al brasileño Altobeli Santos da Silva, que al final terminó tercero detrás del argentino Julián Molina.

“No caigo todavía. Estoy muy feliz y agradecido con Dios”, dijo a FútbolUy en un diálogo con constantes referencias religiosas y de fe. “Dios es el que me sustenta y cumple las promesas que hace. Yo sé que tiene un propósito conmigo por medio del atletismo”, expresó.

“No sé si alguna vez alguien debutó en un Sudamericano de mayores siendo campeón”, agregó Soca, quien cumplió al pie de la letra la indicación de su entrenador. “Me dijo: ‘Llegá cómodo hasta la novena vuelta y ahí hace lo que quieras’. Aguanté y, cuando me dio, esprinté”, explicó.

Cruzar la meta fue “un alivio, un descargo”. “Estos dos meses fueron muy duros para mí. Yo estaba aislado en Estados Unidos y cuando llegué acá noté la envidia que hay. Me sentí muy presionado. Después que gané la medalla me sentí liberado aunque no le tengo que demostrar nada a nadie”, comentó.

Fuente: FútbolUy