Miercoles, 15 de Marzo del 2023 - 10:29 hs. 280
Por unanimidad el Senado votó las rebajas al Impuesto a la Renta a las Personas Físicas (IRPF) y al Impuesto a la Asistencia a la Seguridad Social (IASS), así como modificaciones en el Impuesto a las Rentas de las Actividades Económicas (IRAE), que fueran anunciadas por el presidente Lacalle Pou en su comparecencia ante la Asamblea General el 2 de marzo.
La votación registró 28 votos en 28 presentes, y ahora pasará a la Cámara de Diputados, donde se espera una rápida aprobación.
"Vengo a informar un proyecto que defiende al trabajador asalariado y de la pequeña empresa en Uruguay"; así inició si intervención el senador nacionalista Sergio Botana, miembro informante del oficialismo.
De acuerdo a Botana la propuesta tiene un gran valor, que "es aún mayor si tenemos en cuenta las perspectivas de desaceleración mundial" y la reforma tributaria de 2007 que, con el tiempo, demostró que "terminó siendo para gravar al trabajador y aliviar a algunos sectores", y detalló que "se quitaron los impuestos a los activos de las empresas bancarias (Imaba), que rendían 47,5 millones de dólares en aquella época; se sacó el impuesto del control del sistema financiero, 6,5 millones de dólares; el impuesto a los servicios de salud, 24 millones de dólares; a las comisiones, 17 millones; a las telecomunicaciones, ocho millones; a las tarjetas de crédito, que rendía dos millones",.
El senador blanco afirmó que "esta reforma se hace porque se puede hacer" y "se hace sin salirse de los límites que marcan los tres pilares fundamentales de la regla fiscal, en especial, el de la expansión del gasto. La economía creció al 5%, la regla de tope de expansión del gasto habilita un incremento del orden del 2,1%".
En la vereda opuesta, el senador frenteamplista Mario Bergara dijo que la oposición iba a acompañar el proyecto de ley, aunque destacó que "ni por asomo" piensan que sea significativo "en términos de magnitud ni que sea el mejor diseño en términos de equidad". El FA lo apoya "en la lógica de que para algunos compatriotas va a haber una mejora y que algo es algo", sostuvo.
Bergara explicó que la rebaja se hace por la vía del aumento de las deducciones "a aquellos contribuyentes de menores ingresos, lo cual no quiere decir [que se dirija] a aquellos uruguayos de menores ingresos ni a los trabajadores de menores ingresos". Recordó que 70% de los trabajadores no paga IRPF y 75% de los pasivos no paga IASS, por lo que "para ellos no hay absolutamente ningún beneficio".
Pero las críticas no solo provinieron de la oposición. El senador Guillermo Domenech (Cabildo Abierto) refirió que el país necesita "una verdadera reforma tributaria". "La mayor parte de la población paga IRPF, IRAE y el IVA mansamente, no siendo consciente de que vivimos en un país donde hay un sector económico privilegiado y otro en que recae sobre sus espaldas todo el peso de la tributación", afirmó el socio de la coalición.
El proyecto implica para el Gobierno una renuncia fiscal de US$ 110 millones, que aproximadamente equivale a un 5% de lo recaudado por estos dos impuestos en el último año.