Luces en el cielo de Termas de Almirón, Paysandú.

Nuestro país tiene un importante legajo en cuanto a avistamientos de fenómenos extraños merodeando por los aires. Porque el paisito no se puede quedar atrás en algo tan inusual como lo puede ser un posible extraterrestre y desde los años 70 traemos anécdotas de carácter cuasi mitológico que involucran a potenciales encuentros de tercer tipo. Los más populares tienen como lugar de referencia la ya famosa Estancia La Aurora, próxima a la línea que divide los departamentos de Paysandú y Salto. 

En 1976, un lugareño a cargo de allí, temiendo que el destello de gran magnitud que veía desde el interior de su casa fuese un incendio, se encontró al salir con algo volador que segundos más tarde desaparecía entre la noche. Más datos sobre la experiencia son resumidas en esta columna de Diario El País. Pero el punto al que nos queremos dirigir no es tanto el hecho en sí sino cómo ese evento particular desembocó en una especie de fiebre de lo paranormal que convirtió a la zona de La Aurora en una especie de lugar de culto para quienes buscan experiencias salidas del libreto de la rutina. Convengamos que allí se encuentra también muy cerca la Gruta del Padre Pío, famosa por su “energía diferente” y que forma parte del combo místico que la aparición en la estancia dejó. 

La ventaja/desventaja de las evidencias: desde el mito de Neil Armstrong hasta la filmación en Termas de Almirón

Se dijo durante años que el principal protagonista del alunizaje, el astronauta norteamericano Neil Armstrong (1930-2012), visitó La Aurora como investigador pues “le fascinaba el tema” que vinculaba la zona con el avistamiento de OVNIS. Zona rural, escasez de medios de registro de evidencias, la credibilidad ingenua de una sociedad que vivía la dictadura cívico-militar. Seguramente, un individuo cualquiera podría haberse acercado al lugar y usar la identidad del célebre astronauta para hacerles creer a los presentes de que efectivamente era así. Luego, el efecto bola de nieve de los rumores harían su trabajo e instalarían el mito en la sociedad uruguaya o, al menos, en la del Litoral. Afortunadamente, un estudioso de la astronomía de nombre Ángel De Vitta se tomó la molestia de comunicarse con el mismo Armstrong, desmintiendo este mito a través de una carta firmada por su asistente administrativa, la Sra. Vivian White.

En contraste a la irracional afirmación sostenida durante décadas en el vox populi sobre la visita del hombre que pisó la Luna, el reciente registro de avistamiento de OVNI en Termas de Almirón gracias al acceso masivo a medios de comunicación que caracteriza a nuestras épocas, podemos al menos analizar de forma seria el supuesto avistamiento. El fenómeno coincide con apariciones similares en Canadá, China y Estados Unidos. Que en el gigante asiático se hayan presenciado fenómenos similares parece ser, según teorías, un chivo expiatorio para impedir sospechas de espías chinos a lo largo del globo. Lo cierto es que, sean drones que buscan información, sean extraterrestres sondeando el planeta o simplemente bromistas que se las ingenian para poner luces en medio de la noche, en nuestro país siempre tenemos primicias para dar de qué hablar sobre este tema.