Este domingo, Shakira y Gerard Piqué celebraron el cumpleaños número 10 de su hijo mayor, Milan. Para festejar, la cantante le organizó una especial fiesta con todos sus amigos en su mansión de Esplugues de Llobregat.

Sin embargo, todo parece indicar que, a pesar de sus problemas, los padres del menor pusieron sus diferencias de lado para festejar junto a su hijo, aunque no al mismo tiempo.

Según ha trascendido, por el acuerdo de custodia que tienen, le correspondía a Piqué estar con sus hijos este fin de semana. Pero el exfutbolista llegó con sus dos retoños hasta la casa de Shakira para la fiesta que la colombiana le organizó al mayor.

El cumpleañero llegó hasta la casa de su mamá con su hermano Sasha arriba del auto de Piqué, quien sonrió e ignoró a la prensa que lo esperaba en las afueras de su casa. El español no se bajó del auto y entró por la casa de sus papás, que está al lado de la vivienda de la colombiana.

Piqué abandonó el lugar al poco tiempo de llegar para asistir a un compromiso con su liga de fútbol, Kings League, que tenía ese día.

Por su lado, Shakira salió a saludar a los fanáticos que estaban afuera de su casa con un poleron con la frase de su canción “las mujeres ya no lloran, las mujeres facturan”.