El jueves, la maestra de primaria Ivana Gissell Núñez Zamit sufrió una descompensación en la puerta de la Escuela No 4 Artigas, situada en Canelones y Salterain, en el barrio del Cordón. Fue trasladada a un centro de salud donde falleció poco más tarde.
El triste episodio provocó enorme congoja entre los alumnos y el personal docente de la institución, quienes recibieron con desagrado la directriz de continuar con las clases ese día
“La enorme molestia es que los cursos continuaron y las maestras sufrieron una situación terrible de tener a su compañera fallecida y seguir como si nada. La acción de la Dirección General de Educación Inicial y Primaria no fue la adecuada ante un hecho tan lamentable”, expresó Alfonso Larraya, secretario general de la Asociación de Maestros del Uruguay (Ademu), en declaraciones al periódico La Diaria.
El docente puntualizo que las clases sí se suspenderán este viernes, dado que la normativa vigente establece que eso se haga el día en el que se lleva a cabo e sepelio, pero consideró que “ante el hecho que sucede en la escuela, con el impacto que genera, nos parece que correspondía otra actitud hacia las maestras de la escuela”, quien señaló que el luctuoso episodio no fue comunicado a las familias de los alumnos para que estas decidiera si iban a buscar o no a su hijos. Esa decisión habría generado malestar en los padres de los menores.
Posteriormente, Ademu emitió un comunicado donde señala que el sindicato “se hizo presente en la Escuela solidarizándose con el colectivo de compañeras, quedando a disposición”.
“El Secretariado de Ademu Montevideo repudia la decisión y el accionar de las autoridades que se hicieron presentes en el lugar, quienes no suspendieron las clases en forma inmediata luego de conocida esta tan lamentable situación. Desde este espacio creemos firmemente en que lo humano debió prevalecer”, concluye el texto.
En la tarde del jueves se viralizaron en redes sociales declaraciones cruzadas acerca del luctuoso hecho, y voces del oficialismo explicaron y respaldaron la decisión de no cerrar la escuela.
La diputada colorada María Roselló explico en Twitter que la maestra “fue reanimada en la escuela, y atendida en la mutualista posteriormente. Estuvo presente la inspección y la Directora General en todo momento. Mañana no hay clases por duelo”, y aseguró que hubo “malicia en el relato” que circuló en esa red social. Asimismo, criticó lo que consideró que era “aprovecharse de una situación tan triste como una oportunidad de dar palo a las autoridades cuando no hubo omisión ningún”, ya que “ todos fueron contenidos de la mejor manera, todos los docentes allí presentes acompañaron la situación”.
Robert Silva, presidente del Codicen, también respondió en redes sociales y defendió las decisiones tomadas.
“Se acompañó y acompañará a la comunidad docente y familias. Hoy estuvo presente la propia Directora General de Primaria y mañana no habrá clases. El equipo de Escuelas disfrutables también estará presente”, escribió.