«No perjudica ni influye. Tenemos buena relación con todos los países, también somos grandes socios comerciales de Brasil y Argentina. Queremos llevarnos bien con todos. Eso no perjudica ni influye», dijo a la prensa.

En tanto, insistió en que las negociaciones entre China y Uruguay para un posible TLC avanzan «sin prisa pero sin pausa».

El pasado 25 de enero el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, visitó Uruguay en donde sostuvo un encuentro con su homólogo Luis Lacalle Pou, en el que entre los temas que abordaron ambos mandatarios destacó la postura de su país ante la iniciativa uruguaya.

En esa ocasión Lula manifestó que Brasil ve «posible» un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre el Mercosur y China y está dispuesto a «conversar» con el país asiático sobre ampliar así la escala del posible acuerdo en que Uruguay ya avanzó de forma bilateral.

«China es el primer aliado comercial con Brasil y Brasil tiene un gran superávit con China. Queremos discutir, con nuestros amigos chinos, un acuerdo Mercosur China», expresó.

La propuesta del brasileño fue recibida con ciertos «matices» pero también con «optimismo» por Lacalle Pou, quien indicó que si se concreta, por el «peso económico» que tiene un aliado como Brasil, Uruguay «se plegaría» y acordaría con China junto al bloque.

Posteriormente, el 7 de marzo Brasil defendió que el Mercosur negocie acuerdos comerciales con otros países de forma conjunta, tras una reunión entre los cancilleres de Brasil, Mauro Vieira, y de Uruguay, Francisco Bustillo, cuyo país quiere proseguir negociaciones unilaterales con China.

«Estamos de acuerdo en profundizar la interacción en el interior del bloque y en buscar la ampliación de la red de acuerdos externos. Consideramos que hay un amplio espacio para trabajar juntos en esa agenda externa del bloque y para buscar la mejor inserción internacional de nuestros países», afirmó el canciller brasileño.