Nueva Zelanda conquistó el sábado su sexto título mundial de rugby femenino en el Eden Park de Auckland, al vencer a Inglaterra por 34-31 en una final dramática y repleta de emociones.

Esta nueva victoria de las Black Ferns, también detuvo la racha de 30 victorias de las Red Roses, el equipo mejor clasificado del mundo. Su última derrota se produjo en julio de 2019 ante la propia Nueva Zelanda, que retiene así su título, ganado en 2017 contra, nuevamente, Inglaterra, la campeona del mundo de 2014.

La medalla de bronce de la competición fue para Francia, que ganó antes a Canadá por 36-0 en un partido desigual.