Para convertirse en anfitrión de un Mundial de fútbol se necesitan varios atributos. A poco de finalizar Qatar 2022, varios países ya inician las tratativas para quedarse con la designación para el 2030. Sin ir más lejos, la candidatura conjunta de Argentina, Uruguay, Chile y Paraguay como sedes para el Mundial 2030 será oficializada hoy martes a las 12hs en un acto que tendrá lugar en el Predio que la AFA dispone en Ezeiza.
En la presentación estarán el presidente de la AFA, Claudio Tapia; el titular de la Conmebol, Alejandro Domínguez; el Ministro de Turismo y Deportes de la Nación, Matías Lammens; y los presidentes de la Asociación Uruguaya de Fútbol, Ignacio Alonso; de la Asociación Paraguaya de Fútbol, Robert Harrison y de la Federación de Fútbol de Chile, Pablo Milad, además de funcionarios deportivos de los tres países.
Alejandro Domínguez será una de las voces que tratará de dar los argumentos para convencer a sus pares de la FIFA. Sin tanto dinero como los otros postulantes, Domínguez apostará a una cuestión más ligada a lo centimental. El Mundial 1930 se jugó en Uruguay y cien años después quieren volver a donde todo comenzó.
Si bien el obstáculo principal tiene que ver con la infraestructura y el escaso poderío económico, también existe otra desventaja: convencer al resto del planeta que es viable organizar este tipo de competencias en cuatro países diferentes. La intención es tener un plano y Uruguay podría albergar solo el partido inaugural, la final y los partidos del seleccionado uruguayo, dejando el resto de los partidos para los territorios restantes.
La definición de la sede del Mundial 2030 se producirá en el 74° Congreso de la FIFA a celebrarse en 2024, dos años antes de la 23º edición de la competencia en Estados Unidos-México-Canadá. La idea de una candidatura conjunta para el Mundial 2030 surgió inicialmente de Uruguay y Argentina. Pero al competir con España y Portugal (principalmente), necesita mayor poderío monetario.